Recientemente ha salido un nuevo informe de UNICEF con cifras actualizadas sobre la Mutilación Genital Femenina (MGF) a nivel global, con el foco en 31 paises de Africa, Asia y Oriente Medio.

Las cifras no son nada alentadoras. Ahora debemos adaptar nuestro discurso y en lugar de hablar de 200 millones de supervivientes de mutilación genital femenina en el mundo, pasamos a hablar de 230 millones.

En este artículo vamos a repasar algunos de los datos del informe para entender la urgencia de seguir trabajando por la erradicación de la mutilación genital femenina.

Quiénes han pasado por la mutilación genital femenina:

  • Más de 114 millones de mujeres y niñas en África
  • 80 millones viven en Asia
  • 6 millones viven en Oriente Medio
  • 4 millones de mujeres y niñas pasan por la mutilación genital femenina cada año.
  • Más de la mitad, son mutiladas antes de los 5 años

El ranking de países de prevalencia de la mutilación genital femenina está encabezado por Somalia, donde el porcentaje se sitúa en un 99% de las mujeres de su población y donde no se ha registrado ningún decrecimiento en los últimos 30 años acorde con las estadísticas oficiales. El panorama es desalentador, no solo para este país si no para casi todos los del estudio, ya que estamos muy lejos de lograr el objetivo de erradicar la mutilación genital femenina para el año 2030, como estaba previsto en los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Kenia debería acelerar su trayectoria hasta 5 veces para lograr el objetivo de la agenda 2030 establecido por la ONU.

La esperanza llega de países como Camerún, Ghana o Uganda en los que este objetivo puede ser alcanzable siempre y cuando siga el mismo ritmo de decrecimiento y no cejen en su empeño por erradicar esta práctica.

El informe de UNICEF muestra bajos índices de mutilación genital femenina en aquellos paises con altos indices de hombres y niños que apoyan el abandono de la mutilación genital femenina como ocurre con Togo, Benín, Níger o Tanzania. Esto pone de manifiesto la importancia de involucrar a todos los sujetos de la sociedad en la eliminación de costumbres dañinas, ya que todos juegan un papel clave en aceptar el progreso y cambios positivos dentro de la cultura.

Los porcentajes de la práctica de la mutilación genital femenina varían mucho de un país a otro, incluso dentro de cada país hay distintos grupos con distinta prevalencia. En el caso de Kenia, situado en el número 21 del ranking, los índices de mutilación genital femenina se han reducido considerablemente en los últimos años en las diferentes comunidades practicantes. Sin embargo, la comunidad somalí keniana sigue con índices cercanos al 90%. Esta es la comunidad con la que Save a Girl Save a Generation trabajamos cada día tanto en Kenia como en España.


Este informe no es más que un refuerzo para recordarnos que no podemos dejar de trabajar en la misma línea y de que nuestros esfuerzos son más necesarios que nunca. El mundo se encuentra en un momento clave en torno a los derechos de las mujeres y niñas, y no podemos confiarnos. Recientemennte escuchamos la historia de tres niñas que han fallecido a causa de la mutilación genital femenina en Sierra Leona, o como Gambia quiere abolir la ley que prohíbe la mutilación genital femenina, promovida por hombres que no ponen en valor la integridad ni los derechos de las mujeres. A pesar de que queda mucho trabajo por hacer y de las políticas retrógradas, no podemos ceder ante ello.

Desde Save a Girl Save a Generation seguimos luchando cada día, con la esperanza de que los próximos informes revelen datos más alentadores gracias a la colaboración de pequeñas y grandes organizaciones, miembros afectados, líderes sociales y religiosos y gobiernos locales e internacionales, para asegurarnos que cada niña no mutilada, sea la primera de las siguientes generaciones.